La criollada tienes 2 leyes fundamentales, la primera es que nunca debes dejar que otra persona te agarre de “huevón” y la segunda consiste en demostrar que eres más “pendejo” que el otro, si cumples que en esas leyes tendrás un futuro promisorio en la capital mundial de la viveza, o sea en Lima.
En las ultimas encuestas que se hicieron en la ciudad de Lima, se pudo observar que el Presidente de la República, Alan García Pérez, cuenta con el 45% de aprobación, una cifra realmente sorprendente por que todos saben que es un ladrón y mentiroso, pero como es “pendejo” nos agarra de "huevones", y el otro 55% lo desaprueba básicamente por una razón, la cual es que no quiere admitir los “huevones” que son, ya que si en realidad no quisieran aquel calificativo como parte de la idiosincrasia del limeño harían algo mas que solo estar sentando como “huevones” observando como es que ese infame presidente, no esta llevando al carajo.
En las ultimas encuestas que se hicieron en la ciudad de Lima, se pudo observar que el Presidente de la República, Alan García Pérez, cuenta con el 45% de aprobación, una cifra realmente sorprendente por que todos saben que es un ladrón y mentiroso, pero como es “pendejo” nos agarra de "huevones", y el otro 55% lo desaprueba básicamente por una razón, la cual es que no quiere admitir los “huevones” que son, ya que si en realidad no quisieran aquel calificativo como parte de la idiosincrasia del limeño harían algo mas que solo estar sentando como “huevones” observando como es que ese infame presidente, no esta llevando al carajo.
Pero no es que siempre seamos “huevones”, y es que una de las grandes aspiraciones de los que habitan en Lima, es tratar siempre de ser “pendejo”, es decir “acriollarse”. Las coimas por evitar las multas, el ir detrás de una ambulancia para aprovechar el carril libre que esta deja al pasar, el hacerse el dormido cuando sube una persona mayor al bus, el querer hacer pasar billetes falsos, el copiar y pegar de alguna pagina web y presentar el trabajo en la universidad o el colegio como si fuese tuyo, la piratería, el llevarse todo el papel higiénico que puedas de algún establecimiento, el pasarse la luz roja cada vez que tengas la oportunidad de hacerlo, hacerse el misio cuando te piden dinero para alguna causa en común, el plagiar en los exámenes, el tratar de meterse a otra sala en el cine cuando terminaste de ver tu película, el favorecer a algún conocido a la hora de escoger personal para un puesto de trabajo, creo que son pruebas suficientes para corroborar mi teoría, que indica que en nuestra sociedad el que es más “pendejo” siempre tendrá las de ganar.
Y ante tanta desfachatez y descaro la pregunta cae de madura, ¿Qué debemos hacer?, creo que el principal problema esta en que somos muy egoístas, anteponemos el bienestar propio antes del colectivo, nunca pensamos en el largo plazo, queremos tener todo en el instante y eso es un error fatal si es que algún día pretendemos ser un país mejor. Cada vez que salgo a la calle me doy cuenta que nuestra sociedad se a polarizado demasiado, y es que es una de dos, o eliges ser "pendejo" o eliges ser "huevón", siempre se trata de ganar, de ser más vivo que el otro y en esa interminable lucha por prevalecer y resaltar por encima de los demás es que me doy cuenta, dejando de lado algún eufemismo, que el país esta que se va a la "mierda".
A veces no se puede ir contra el destino, y pareciera definitivo que seremos siendo participes de nuestra sociedad llena de cachinas, de combis asesinas, de piratería desvergonzada, de otorongos en el congreso, de malos gobernantes que juegan con el olvido de la gente, de borrón y cuenta nueva. Y es que nuestro orgullo de ser peruanos, solo se limita cuando la selección gana un partido aun sabiendo que no iremos al mundial, y cuando eso ocurre la gente se alegra, sonríe, y muy fervientemente canta el himno nacional por única vez en el año convencidos de que es el segundo más hermoso del mundo, toman hasta embriagarse y celebran hasta más no poder, y esa sensación solo durará una noche, quizás un día, pero nada más. Cuando nuestro orgullo podría extenderse más, si es que todos se propusieran respetar un poquito más a los demás y si trataran de soslayar el beneficio propio para anteponer el bien común, hablando en términos “peloteros”, si es que jugáramos más en equipo, tal vez si empezáramos a hacer eso, nuestra nación cambie, y nos convirtamos en una sociedad digna de respeto. Pero nosotros somos “pendejos” pues.
Menos mal la "criollada" no tiene nada que ver con la música criolla, porque se imaginan que seria de este día si estos términos tuvieran relación, todos los locales de Lima estarían infestado de músicos y cantantes “pendejos” agarrando de “huevones” a los asistentes, y estos “huevones” comprando cerveza y haciéndole ganar dinero al dueño del local, que obviamente seria otro “pendejo”.
Hoy mi madre en un momento de cólera me dijo que soy un “huevón”, creo que tiene razón. Y ¿tú? Eres “pendejo” o “huevón”.
JoSé!!!